martes, 1 de marzo de 2005

"Variaciones Goldberg"

Invito a Almudena a oír las variaciones que compusiera Bach para teclado interpretadas en el Auditorio Nacional por Maiski, Bashmet y Rachlin, violonchelista, violista y violinista, respectivamente. Pero no puede acompañarme, de manera que me compro la versión de Gustav Leonhardt por 10,50 euros, con lo que me ahorro, como mínimo, 129,50 euros, en el caso de que hubiera comprado las entradas más baratas. Ya sé que no es lo mismo, pero seguro que disfrutaré un montón de veces. La primera vez que oí de esta sublime obra de Bach fué en el libro que cito en mi perfil, publicado en Tusquets, superínfimos y que leí en julio de 1987. Ahora lo estoy encuadernando.

¡Por fin los pergaminos!



Llegaron el pasado viernes y hasta hoy no he tenido ocasión de abrir el paquete.

Esta mañana he hablado con Santiago Naya, empleado de mi proveedor que lleva muchos años preparando pergaminos y me ha explicado el proceso: La piel en bruto se introduce, una vez pelada, en unas máquinas de curtido que le quitan toda la carne y demás adherencias. Seguidamente, se introduce en un bombo con disolventes, enzimas, ácidos, sal para el pH adecuado y otros, con lo que se consigue el pergamino. A continuación se tensa en unos aros mediante un promedio de 22 cuerdas, dependiendo del estado de la piel, cada una de las cuales soporta una tensión de 15 o 20 Kg. Y ya sólo resta esperar a que los clientes las pidamos.

Ésta es la comprobación de que estaban en condiciones y seguidamente he procedido a abonar su importe de 383,67 euros. Si le añado los portes de 12,08 euros, tenemos 65.847 de las antiguas pesetas. Nunca he estado más contento con una inversión.